Dos alegrías este fin de semana (y no terminó): una, fui a ver finalmente The Rewrite (mal traducida como, con gerundio, puaaaajjjj, "Escribiendo de amor") con Hugh Grant. Me gustó enormemente, buenos diálogos, mucha cita de películas y de novelas de distintos tipos, mucho sobre enseñanza y relaciones profes alumnos pero sin pedantería, sin ponerse demasiado serios... Haber ido sola y que al mismo tiempo Odi viera otra cosa..., fue rarísimo pero es lo que tienen de bueno los cines múltiples. Yo amo las comedias de amor..., me hacen sentir bien y cuando son inteligentes las disfruto mucho...Me reí, extrañé tener a Odi al lado y me alegré de haberla visto aunque para eso tuviera que irme a la otra punta del mundo (suele pasar que el Norte tenga mejores películas que el Sur, donde yo vivo y que amo --no me mudaría al Norte--, no sé por qué será, eso último es irónico). 
Lo otro fue hoy: fuimos con Odi al mercado de Liniers, a sentirnos en Perú (nunca fuimos a Bolivia) y mirar frutos raros, y ajíes raros y espacios que no parecen Buenos Aires pero lo son. Me encantó comer en el restorancito de arriba, con dos que tocaban música (no muy bien pero bueno...) mientras alrededor todos tomaban sopa (yo soy Mafaldesca, eso sí que no). Fue una mini vacación. Siempre me ha gustado explorar lugares nuevos.