Una recomendación para leer en este verano...
Acabo de terminar de leer LOS QUE VOLVIERON, una bellísima novela de Márgara Averbach. Es la historia de dos militantes asesinados por la dictadura y tirados en una zanja, que fueron recogidos por un vecino y enterrados como NN en el cementerio de un pueblo cercano. Treinta años después un grupo de chicos de la secundaria del pueblo empieza a preguntarse intensamente (como suelen ser las preguntas cuando uno tiene 17, 18 años) quiénes están debajo de esas lápidas. La novela está basada en hechos reales ocurridos en el pueblo santafesino de Melincué. Las voces de esos chicos se mezclan con los de una madre y un hermano que desde hace décadas buscan. Y con las voces de ellos, "los que se perdieron", que desde la muerte vagan, a la espera de que alguien restituya sus nombres y su historia. Copio un pedacito del primer capítulo:
" `Ningún nombre´: eso dicen las lápidas del cementerio a un costado del pueblo que, vivos, no caminamos nunca. Un pueblo cualquiera. ´NN´ proclaman las dos lápidas, como si los dos fuéramos la misma persona.
Desde entonces, en el día, vagamos en torno del fresno, bajo el que, algunas tardes, duerme el que cuida el cementerio. Desde entonces, en las noches, nos repetimos el Antes en voz baja. La memoria nos tiembla sobre manos inventadas: no queremos perderla. Bailamos en el mismo viento, juntos como dos banderas, aferrados a ella. En el Antes también bailábamos uno con la otra y el mundo nos sostenía; en el Antes había risas y esquinas en que encontrarse".
Una novela intensa, necesaria y con una prosa intensa y movilizadora. Un homenaje a la militancia y al amor, pero a la vez una mirada aguda e inteligente sobre las nuevas generaciones de argentinos que, en plena adolescencia, son capaces de levantar la vista del celular, mirar y escuchar las voces de quienes ya no están, las voces de los que siguen gritando en silencio.
(Hernán en el Facebook)