18 de octubre de 2015

Bueno, ayer me fui a ver la de Guillermo de Todo, dos pelis en un fin de semana para compensar algunos que no fuimos este año... Y es raro: yo creía que iba a ser de menos terror, lamento haber ido, no me gusta pasar miedo en el cine, no me gusta nada y pasé miedo (mientras Odi se aburría, pero bueno..., son maneras de ser). Y eso no fue todo. En el momento, a pesar de esos momentos (que son algunos solamente... y no muy frecuentes, por suerte), la pasé más o menos bien, entendí que era lo que llamábamos (cuando yo estudiaba la literatura canónica de los EEUU) el "Tema Internacional", un nombre muy pero muy egocéntrico y excepcionalista para hablar de una comparación EEUU-Inglaterra, por suerte como a mí más me gusta: a favor de EEUU y en contra de Inglaterra y su aristocracia (hay versiones al contrario, por supuesto, el último período de Henry James es así), vi las reglas del género gótico en todo su esplendor (lo mejor de la película es el arte y la casa gótica del caso, excelente versión de esa mezcla de antiguo y moderno que es el comienzo del siglo XX, autos y caballos, ascensores y vestidos largos, industria y minería y deseos de invención mecánica), las actuaciones me parecieron muy buenas... pero cuando salí pensé que me pareció vacía, psicologista como a mí no me gusta, nada de la política maravillosa que había en El Laberinto del Fauno... En fin, no. Me quedo con Operación Ultra.

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