18 de marzo de 2018

Hoy, como no pudimos ir a Ezeiza por la lluvia y yo soy yo y no aguanto un domingo entero en casa..., fuimos al cine de nuevo. Elegí yo..., sin esperanza porque lo que podríamos ver juntos y nos interesa a los dos, ya está visto... así que me decidí por Pantera Negra. No son lo mío los superhéroes, salvo excepciones, pero con ese nombre y un héroe negro y con un horario razonable en que la daban SUBTITULADA (yo no tolero las dobladas) no tan lejos (Avellaneda)..., bueno. No esperaba mucho pero fue hermoso verla. Es una película de superhéroes por cierto y la aparición del agente de la CIA está totalmente de más y tiene que ver con la necesidad de ablandar a las fieras de Hollywood..., lo mismo que la confrontación final (hay dos enemigos, que convierte en cruel a un personaje muy interesante) y tal vez más detalles que no tengo tiempo de poner ahora. Pero, justamente, es una película de superhéroes y los héroes defienden un país de África, hablan contra los muros antiinmigrantes, dicen que "home", "casa" es África; empieza en Oakland (de donde salieron las Panteras Negras de la realidad) y termina en Oakland, cosa que supongo que en Argentina no se entiende pero a mí me conmovió; deja que el segundo "malo" (el de la confrontación final, un personaje bastante criticable en varios sentidos, como ya dije) diga la mejor frase sobre la esclavitud..., al final, recuerde claramente el comercio esclavista y el Atlántico Negro; habla de lo que se hace con los negros en EEUU, desde matarlos a meterlos en la cárcel sin razón; una película que da a las mujeres un rol absolutamente guerrero y poderoso..., y que tiene la mejor música del mundo, la de África..., ah, sí que valió la pena. La pasé realmente bien.
En la mitad, unos jovencitos se fueron. Calculo que ellos necesitaban más acción y menos reflexión, menos contacto con los antepasados, menos magia... Más puñetazos. Calculo.

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