Fuimos al Cosmos UBA a ver Crimen en El Cairo. El mundo que pinta en El Cairo anterior a la primavera árabe me pareció fascinante, el nivel de corrupción, las calles de todos los tipos de barrios de una ciudad que parece un mundo, todo perfectamente bien pintado por la cámara que de a ratos, se vuelve muy subjetiva. El nivel de violencia, claro. Las autoridades totales como la policía convertidas en corrupción absoluta... Todo eso me gustó. La película hace un paralelo entre esa corrupción, esa falta de esperanza, ese valor dinero al frente de todo, con el gobierno de Mubarak. Del otro lado, hay furia, protesta, rebelión, cada vez más abiertas..., las tres, cada vez más en las calles. En ese nivel, la película vale la pena. No me gustó en cambio todo lo que tiene que ver con el caso policial, que para mí (occidental y muy, muy consumidora de policiales) era previsible y esperable.
El punto extra fue la sala: diminuta, una especie de minicine de una casa grande, digamos... Pero vimos, vimos bien y a diferencia del horrible cine Premier, en este, por lo menos cobran lo que dan, o sea poquísimo, a mí, jubilada, 20 pesos, a los demás 40. Hay que apoyar este tipo de lugares. De pronto, recordé los tiempos en que iba a ver películas del comunismo con mis viejos, rusas, polacas, y demás. Nunca me voy a olvidar del Hamlet ruso que para mí es bellisimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario