Como ahora sigo viendo Sísifo (serie coreana en Netlix) a solas (con Odi pasamos a compartir la muy diferente Katla, de Islandia), creo que llegó el momento de describirla un poco y explicar (sobre todo a mí misma) por qué me gusta (aunque le veo todas las costuras, y todos los flancos criticables desde lo "artístico") y por qué en un momento dado me pareció que Odi ya no estaba cómodo viéndola, que no la disfrutaba. Para mí (que trabajé desde hace décadas como crítica literaria, y sigo haciéndolo cuando puedo) es importante saber quiénes pueden disfrutar realmente de algo y quiénes no (por gustos, por costumbres, por preferencias, y un largo etcétera); siempre trato de decirlo cuando redacto una crítica. 

Empecemos por lo más tonto: "Sísifo" es una serie con el mismo actor de "Stranger", que a mí me conmueve muchísimo (esto es totalmente personal y totalmente discutible pero es así..., es bastante bueno como actor, pero además hay algo en él que me lo hace totalmente irresistible, de la misma forma en que me eran irresistibles ciertos galanes del cine clásico cuando los veía en mi adolescencia). 

La historia es una mezcla de distopía, ciencia ficción (departamento "viajes en el tiempo"), aventuras heroicas y violentas (pero con heroína mujer; sin eso no las aceptaría, así, me parecen divertidas) y, sí, sí, telenovela. Pinta un amor en el que la pareja sufre separaciones para que después llegue el maravilloso reencuentro, el beso, ese aflojarse de un personaje que no parecía hecho para querer. Ahí van los gustos personales: a mí, no me entusiasma la ciencia ficción excepto cuando crea mundos completamente nuevos, porque ahí lo que me llega es la imaginación dedicada a reconstruir una sociedad; en cambio, lo "científico" no me interesa, la verdad sea dicha, me salteaba esas partes cuando leía Verne; a papá, científico de alma, lo conmovían, por dar un ejemplo distinto al de Odi. Pero en este momento de cierta... inquietud, de frío (las estaciones invierno y otoño me suelen golpear mal), y de a ratos de..., no sé, algo que no puedo definir bien pero no es positivo, necesito mucho de la secuencia separación-reencuentro. Me hace realmente feliz ver eso, aunque sea esperable y un cliché. Las escenas de películas que recuerdo de memoria, diálogo incluido, son de ese tipo. Las series y películas que me dan lo que llamo "placer culposo" (lo de la culpa viene de Filo, claro) son de ese tipo. Amo la "scene a faire" (perdón, no me quiero poner a buscar acentos franceses, sé que va con acento), "escena que debe hacerse", un recurso del melodrama que siempre quise. Me hace sentir tan bien durante un instante... No hay duda de que es un "recurso" fácil, pero a mí me levanta el ánimo. Es lo que busco en series como Outlander. Sísifo es así a pesar de las diferencias culturales que, además, sé que no comprendo en profundidad. 

Para alguien amante de la ciencia ficción de otro tipo (como Odi) y no muy amante de lo que estoy describiendo, entiendo que es demasiado larga (falla común en las series coreanas, que siempre duran más de lo prudente, excepción hecha de "Stranger"), pero a mí me está gustando mucho. Hacía tiempo que no encontraba algo así, parecido a lo que me hacían sentir series como Gentleman Jack,   o todas las basadas en Jane Austen, por dar dos ejemplos cualesquiera.