6 de febrero de 2016

Ayer, "Carol". Entiendo que no es para todos. Tiene eso que le escuché a un crítico en la radio: es un melodrama, una de amor, empecemos por ahí. A algunos esas pelis no les gustan. Pero es una de amor diferente, una de amor entre mujeres. Queda claro, sobre todo al final, cuando una de las dos mujeres, Therese, se decide, en una fiesta, que ese amor es igual a cualquier otro y que por eso hay que tratarlo como cualquier otro. En ese sentido, es una película valiente que se atreve a no castigar a los que son diferentes. Pero, como dijo el crítico (esto no lo invento yo) es melodrama frío. No tiene música de fondo casi nunca, nada que te haga..., que te obligue a sentir algo. Y lo cuenta con una delicadeza absoluta. Por eso..., no a todos les va a gustar.
Es clásica: hace un círculo completo, un flashback que dura casi toda la película y después vuelve y muestra el final. No es nuevo el sistema pero está muy bien hecho.
La reconstrucción de época, los 50, es perfecta, para quien sepa la historia de los EEUU, más, desde los discursos que aparecen en la tele, hasta que sucede entre Navidad y Año Nuevo y se nombra el año, hasta los discos, los teléfonos, las tiendas, la manera de vestirse de clases bajas y altas (hay de las dos), los autos.
Está llena de pequeños apuntes, que a mí me fascinaron: sobre la diferencia entre las vidas de unos y otros y el asombro de los de abajo cuando ven cómo viven los de arriba; sobre el machismo; sobre las maneras de reaccionar frente a presiones que nos piden que seamos lo que no somos; sobre los empleados y los jefes de los empleados.
La disfruté mucho aunque el cine estaba loco y habían puesto un aire insoportable para mí (la próxima vez, al cine, voy con chalina, saco o algo, esta vez, me olvidé y me arrepentí mucho). Creo que fui la única del grupo.

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