19 de noviembre de 2017

Ayer, Asesinato en el Orient Express. Ese libro, que como todo Agatha Christie está mal escrito pero es muy ingenioso, fue importante para mí. Mi primer policial: me dejó sin aliento. Nunca había leído nada parecido. El policial sigue siendo uno de mis géneros favoritos aunque por supuesto no ella. Pero es un libro que recuerdo casi de memoria, incluyendo los títulos de los capítulos, que también me impresionaron: "Una mancha de grasa en un pasaporte húngaro", "Un grito en la noche"... Vi las versiones anteriores. Esta no me emocionó ni me encantó, nada de eso. Hay errores para mí, sobre todo porque Branagh es demasiado lindo y simpático para ser ese detective insoportable que es Poirot (un personaje que odio y odié desde esa primera vez). Pero lo que sí me interesó fue qué le cambiaron porque habla de cierta diferencia de ideología en los tiempos: la aparición de la cuestión racial me pareció notable... sobre todo porque la pareja del médico es la peor posible (un hombre negro y una mujer blanca). Y me interesó que se cuestionara el binarismo (bueno versus malo) que es la base profunda de esos policiales europeos. Ese cuestionamiento (light pero evidente, y fuertemente marcado) al final fue lo mejor para mí... La duda del detective que no está satisfecho con perdonar... porque no es tan sencillo, no debería serlo, defender la justicia por mano propia. Eso me interesó. Y en estos tiempos horrendos, creo que ir una semana dos veces al cine viene bien.

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