Ayer seguimos con la serie que estamos mirando en Netflix (nos falta poco, no dije nada hasta ahora porque me gustan más Mrs. America (que ya terminó), la que estoy viendo sola en HBO Go, "We are Who We are", y ahora empezó la que esperé todo el año: "His Dark Materials" y hablé mucho más de eso). En general, por momentos, está un poquito demasiado del lado del terror para mi gusto (a veces, no miro, se pone demasiado tensa). Es sobre una epidemia tipo ébola (más bien, la muerte rápida es más dramática) y la forma en que se destruye, se terminan las rutinas, las autoridades, las formas de vida en Rusia. Se llama To the Lake, porque los personajes que sigue el guion van hacia un lago donde tal vez puedan estar seguros. En general, le veo lo que les vi siempre a las rusas (además de actores cuyo nombre no sé pero ya reconozco de cara): una buena noción del ritmo, muy buenos diálogos y profundidad psicológica de los personajes, buenos actores y actrices, y buena tensión. A veces, se hace muy evidente la influencia del cine que yo solía ir a ver en el Cosmos, el de Einsestein... y sus seguidores. No me entusiasmó mucho (no es lo mío la constante tensión en medio de un frío espantoso que me duele en el cuerpo solo de mirarlo) pero sí la seguí hasta ahora, cuando en el capítulo que vimos (no recuerdo el nombre) por fin hay una cuestión de rebelión social, de unión de un grupo contra el abuso y la muerte que traen soldados, la autoridad que tal vez se refugió en alguna parte. Las tomas en conjunto y de a una de las caras del pueblo, la forma en que consiguen armas, el ataque a los soldados, la revolución final..., todo eso me hizo muy bien. De pronto, se abre la cámara a una dimensión social, a cierta maravilla que se había preanunciado al comienzo del capítulo con un personaje increíble de un tipo que limpia la ruta de nieve aunque ya no pasa nadie y es abierto y directo y ayuda porque quiere ayudar. Lo anterior está bueno..., no es lo mío, este último capítulo (si fuera una película) me habría fascinado.