5 de diciembre de 2020

 Ayer, terminé "The Forty Year Old Version", una película en blanco y negro de Netflix. Me fascinó. Ese es el cine que amo. Combina el tema del arte y los artistas (la protagonista tiene 40 y es dramaturga, una promesa en tiempos de la juventud; va a volver a poner una obra y al mismo tiempo, descubre que tal vez necesita convertirse en rapera), tema que en general no me interesa demasiado, con la cuestión racial de los negros en los Estados Unidos. El guion explica narrativamente la forma en que el racismo entra en la obra, la domina, la perturba, la arruina; la forma en que el poder se divide y se tuerce dentro de una producción teatral. Cada escena cuenta, desde el casting a los cambios que se le imponen al texto hasta que la protagonista dice "Ya no es mi obra".  Y la visión de Harlem, del Bronx, de los puentes y las calles y las partes separadas, en guerra, de la Nueva York de siempre, esa ciudad extraña y gigantesca, es fabulosa. La fotografía en blanco y negro y las actuaciones, perfectas, todo está donde debe. Fue un enorme placer verla aunque fuera en varias veces como se dio. 

No hay comentarios: